Un gato estresado puede suponer un riesgo para sí mismo y para las personas de su entorno.
A los gatos les encanta cazar, investigar, jugar… Sin embargo, también son animales que aprecian muchísimo la calma y que pueden recibir de manera muy negativa un elemento perturbador a su alrededor. Desgraciadamente, en muchas ocasiones te será imposible evitar este tipo de situaciones, y por ello es importante que sepas cómo gestionarlas.
¿Cómo es posible calmar a los gatos estresados? ¿Quieres contener el enfado de tu gato sin llevarte ningún arañazo? Sigue leyendo para descubrir algunos consejos.
Pasos para tranquilizar un gato estrenado
Un gato estresado puede suponer un riesgo. Los felinos, al sentirse nerviosos o asustados por algo que se encuentra a su alrededor, pueden perder la perspectiva y arañar o mover a alguien que se encuentre a su acreedor. Por ello, te conviene actuar con precaución y no dejarte contagiar por el nerviosismo de tu gato.
- Acércate a tu gato solo si es necesario. Si lo haces, aproxímate a él lentamente y siempre procurando que tu gato no sienta que tratas de arrinconarle o atraparle.
- Hay sonidos que calman a los animales. Algunos siseos o canciones relajantes pueden ser de ayuda.
- Igualmente, puedes traer a la habitación algún elemento que tu gato relacione con el bienestar, como algún juguete, premio… Siempre sin obligar a tu gato a cogerlo.
- Si tu gato persiste en su actitud, déjale solo. Sal de la habitación y cierra la puerta tras de ti, de modo que tu felino se sienta aislado y protegido.
Las feromonas, un remedio contra los nervios
Los gatos segregan feromonas de manera natural en su interacción con otros felinos.
Estas feromonas, aisladas en un laboratorio y disponibles para ti en distintos formatos, permiten que un gato estresado se sienta calmado de una manera rápida.